El único entorno que merece la pena de este lugar es club náutico donde está ubicado el barco. Muy buena recibida en la base. Las chicas administrativas son muy hábiles y simpáticas. El barco estaba todo limpio y listo para empezar el crucero. Después de las explicaciones del staff técnico que fueron muy claras, pudimos empezar el precioso crucero que se reveló inolvidable. Todo fue muy bonito, también los pequeños problemas que tuvimos con el ancla (culpa de una piedra en el fondo del mar que intentó impedirnos continuar nuestra ruta).
En definitiva, el barco estaba muy bien, perfecto para una pareja en búsqueda de tranquilidad. La empresa armadora fue al altura de la situación en cada momento y Mallorca... que es una isla preciosa.
Muchas gracias
Gianfranco